Charlas musicales #4: Entrevista a Abel Franco
En esta nueva entrevista de Charlas Musicales, tengo el enorme placer de entrevistar a uno de los grandes guitarristas a nivel nacional: Abel Franco.
Autor del disco "Sin Palabras", guitarrista versátil, amante del buen sonido y del detalle, arreglista y productor, compositor, fiel y honesto con su filosofía musical, endorser de grandes marcas, japonófilo, trabajador constante... Si quieres conocer mejor a este gran músico, no dudes en leer la entrevista completa, en la que ha compartido reflexiones muy interesantes que, estoy seguro, no te dejarán indiferente... ¡Vamos allá!
1. ¿Cómo fueron tus inicios musicales y tu primer contacto con la guitarra?
Desde pequeño sentí que la música era de lo más especial que me rodeaba; algunos “juegos” con instrumentos en el colegio fueron alimentando esta atracción y fue a los 14 cuando decidí que quería ser guitarrista profesional. Comencé a dar clases a los 15 y desde entonces no he dudado ni un momento que la guitarra tendría que ser una de las cosas más importantes de mi vida.
2. Cuéntanos un poco cómo ha sido tu evolución musical y estética desde tu ADN más rockero hasta la fusión de estilos que queda patente en tu disco “Sin palabras”.
La verdad es que el cambio ha sido grande. Cuando era niño artistas como Perales, Ramazzoti, Mocedades, música clásica, Serrat y todo aquello que sonaba por casa me gustaba en mayor o menor medida. Siempre había mucha música en casa de mis padres.
Después, imagino que influenciado por multitud de circunstancias, la música de carácter más duro y agresivo me fue gustando y pasando a primeras posiciones, hasta que entre los 14 y los 20 lo que más escuchaba era Anthrax. Metallica, King Diamond, Iron Maiden, Gary Moore, Joey Tafolla, Marty Friedman, Jason Becker, Yngwie, Helloween, Kreator… (sin dejar el clásico) te puedes hacer una idea…
A los 17 comencé un proyecto que podría definirse como progresivo instrumental con un teclista. Un año y medio después él decidió dejarlo y ése fue un punto de inflexión que me costó superar y me llevó a la certeza de que para que un proyecto no convencional madure uno mismo tiene que ser el encargado de hacerlo crecer y no depender de otros en la medida de lo posible.
A los 21 comencé a tocar con Moncho Otero –cantautor- con cierta regularidad. La idea de unir guitarra clásica y voz con eléctrica parecía funcionar… aunque no a todo el mundo le gustase. Poco a poco me fui abriendo a más colores musicales y accedí a otros proyectos de más envergadura, hasta que a los 23 entré en el IMT y ahí un aire nuevo de armonía abrió mi mente y comencé a descubrir muchos sonidos y nuevos caminos que harían que diera un salto importante en mi forma de ver la música.
Nunca me han gustado los “obligados”: Beatles, Rolling, AC/DC, Purple, Zeppelin, B. B. King, y otros tantos… me parecen tremendamente aburridos y, en la mayoría de los casos, previsibles y muy sobrevalorados, fruto del momento socio cultural de la época. Me parece muy adolescente afirmar que son “los clásicos”, como si la música se debiera a ellos… cuando realmente “los clásicos” hacen muchos años que ya no están presentes entre nosotros: escribían con la luz del día en los mejores casos y con la luz de velas muy a menudo.
El fácil y gastado recurso de menos es más esconde una doble capa en la que mucha gente se refugia, y acude a acomodarse debajo de ella para repetir una y otra vez los mismos acordes de siempre aludiendo autenticidad y sentimiento. Habría que saber diferenciar entre falta de recursos y talento por un lado y descubrir la sencillez y poder plasmarla en la música por otro.
Lo complicado y bonito de evolucionar es que debes evitar repetirte y ello te obliga a buscarte a ti mismo continuamente.
A los 25 tuve la oportunidad de arreglar y producir un primer disco con una banda de 9 personas y ése fue otro gran salto. A partir de ahí la cosa fue creciendo de un modo más progresivo: la música más extrema hacía tiempo que era un complemento y no una prioridad. El jazz me empezaba a gustar, ya que empezaba a trazar esos acordes que abrían las voces de mi guitarra y ello me hacía respirar aire fresco y enriquecedor.
Después de eso pude empezar a dedicarme profesionalmente (aunque mucho antes ya lo hiciera en actitud) y he pasado por Big Band, música pop, arreglos, metal, Bossa, etc. Desde hace unos 10 años la fusión me empezó a atraer mucho y desde entonces es mi estilo preferido, aunque no lo haya puesto de lleno en “Sin palabras”, ya que me sentía muy principiante como para abordar un disco puramente de fusión.
El momento vital en el que preparé “Sin palabras” se desarrolló en unos buenos años que creo quedaron patentes en el disco.
3. ¿Cómo compaginas tu labor como guitarrista, arreglista, productor y compositor con el de la docencia y tu trabajo de divulgación y enseñanza través de distintos canales de difusión como tu canal de Youtube “Back to Basics”?
Normalmente no todo viene de golpe ni tengo trabajos que me obliguen a “ejercer” en todos esos frentes. No obstante no me queda otra que quitarme horas de sueño y levantarme aún de noche los días que los horarios familiares me lo permiten para poder ir pronto al local y estar allí 12 ó 13 horas. Desde que mi pequeña Atma vino al mundo hace año y medio el tiempo se ha restringido algo más, pero ahora que ya es menos dependiente estoy planeando retomar el estudio de un modo más serio de nuevo y quizás abordar un nuevo proyecto discográfico.
4. Has tenido la oportunidad de participar en proyectos musicales muy diversos en cada una de las facetas de las que hemos hablado. ¿Cuáles han sido los momentos que más te han marcado en tu trayectoria artística y en qué formato te encuentras más cómodo?
La producción del año 2000 (Dama) fue dura por tener que trabajar y dirigir a 8 personas y a mi mismo; músicos con más bagaje que el mío propio y un proyecto complicado para mí por aquel entonces. El resultado tiene un sabor de “cariñoso” recuerdo.
Varios años de orquestas me dejaron un recuerdo bastante negativo y considero que es de lo peor que podemos hacer a nivel musical y personal por diferentes motivos. En España hay un problema cultural muy grave y la forma en que las orquestas trabajan y son tratadas es una buena prueba de ello. Espero no tener que volver a hacerlo.
Trabajar en la gira de un musical siempre es un reto exigente. A pesar de no ser tener un libreto muy complejo, “High School Musical” me llenó de experiencias y me regaló un enorme e importante crecimiento en varios sentidos.
Después de ello vinieron grabaciones de estilo más rockero y otras no tanto, pero siempre me gusta mucho grabar en estudio y disfruto mucho al hacerlo.
Por supuesto mi disco ha sido lo más importante que he hecho a nivel musical y está lleno de una energía muy especial.
5. Han pasado varios años desde la publicación de tu primer disco en solitario “Sin Palabras”, ¿Qué recuerdos guardas del nacimiento de la criatura y cómo ha sido la experiencia de llevarlo al directo, teniendo en cuenta la dificultad que entraña este tipo de formatos?
Tardé bastante tiempo en poder dar forma a lo que hoy ya se puede escuchar porque tuve que compaginar la composición, la elaboración de los arreglos y la posterior pre-producción con el trabajo diario de clases, actuaciones, ensayos y demás. Pero como siempre he afirmado tanto en persona como en todas las entrevistas que he realizado creo firmemente en que cada creador debe de realizar su trabajo en primer lugar para sí mismo. De este modo será verdad y podrá ofrecerlo de un modo honesto al resto del mundo independientemente de la repercusión que pueda llegar a tener o no. De ahí que todo el proceso resultase apasionante y muy enriquecedor. Se podría decir que fue toda una aventura y espero que haya algunas más.
Los recuerdos que guardo son los de explorar y bucear para poder encontrar lo que tenía que quedarse en forma de temas o composiciones. Tener la sensación cada día de que estaba por el camino correcto era muy estimulante y al mismo tiempo me daba la energía que necesitaba para poder continuar y acabarlo.
Los recuerdos de estudio son muy buenos también. Era ya el momento de plasmar definitivamente todo aquel trabajo que había sido elaborado tiempo antes. Fue muy cansado y me desgastó bastante, ya que tenía que estar al 100% en todos y cada uno de los procesos del disco. La sensación de estar muy bien acompañado por músicos y amigos fue totalmente necesaria y sin ellos nunca podría haber realizado de aquel modo "Sin palabras".
6. Qué duda cabe que la música desnuda la personalidad del autor. Aunque no tengo el placer de conocerte personalmente, después de escuchar el disco lo que me transmites a través de tu música precisamente es que eres una persona enérgica y positiva, espiritual y tranquila al mismo tiempo, soñadora e imaginativa, muy detallista y trabajadora… ¿te sientes identificado?
Bueno, creo que has citado muchas virtudes y precisamente porque no me conoces te has dejado unos cuantos defectos, jajaja jajaja.
En general sí concuerdo con lo que comentas aunque con ciertos matices y por supuesto teniendo en cuenta la situación y el momento, pero básicamente creo que si no eres enérgico, detallista y trabajador el resultado de todo lo que hagas estará vacío y será de muy poca calidad en todos los aspectos.
La principal motivación que debe movernos es la de estar satisfechos con lo que hagamos; cada uno aplica a sí mismo sus valores y baremos para lograr los objetivos que se marque en su camino.
7. ¿Cuáles son los aspectos positivos y negativos de ser endorser de marcas tan prestigiosas como Yamaha, Mesa Boogie o D’Addario?
Este es un tema que a veces puede ser delicado y como hoy en día se vive de aparentar en numerosas ocasiones, decir las verdades suele ser de poco agrado para el que escucha y a menudo suele traer situaciones complicadas para quien las afirma.
En mi opinión mucha gente está equivocada en cuanto a lo que una relación entre artista y marca debe ser. Debe de existir un equilibrio basado en el respeto, el trabajo y las ganas de querer construir en equipo. El dinero no debe de serlo todo, pero hoy en día en este tipo de relación es lo único que suele importar. Son las cifras tanto en ventas como en seguidores y visualizaciones de vídeos lo que determina “lo fantástico que es un artista”; por eso hay que manejar y plantear con cuidado con quién trabajas y el desgaste que estás dispuesto a realizar.
España es un país muy complicado para vivir como músico profesional. Se consideran músicos de “Primera División” a aquellos que están desempeñando un trabajo con artistas famosos, musicales o situaciones similares. Sin entrar a valorar este tipo de trabajos o la supuesta calidad de estos “artistas”, hay que ser conscientes de que aquellos que realizan este tipo de trabajo en España lo hacen en número muy reducido y que un gran número de buenos profesionales se tiene que ganar la vida abriendo varios frentes paralelos… Conozco muchos y buenos casos.
Las grandes marcas casi exclusivamente quieren artistas con un número de actuaciones al año cercanas a 100, con apariciones en televisión, con discografía y con un bagaje profesional, cosa que por supuesto se entiende. Al menos en España es prácticamente imposible conseguir conseguir estas cifras (por no hablar de vínculos con televisión, prensa, radio y todo ello a la vez) y no por ello se es peor profesional ni muchísimo menos.
Si la marca consigue entender esto entonces las cosas pueden ir bien. Pero digo “pueden” y no “deben”. Como sabrás acabo de finalizar recientemente mi relación profesional con Yamaha. El ser meticuloso, detallista y trabajador puede ser en algunos casos una traba para construir con una marca. Éste ha sido el caso de mi relación con Yamaha, en la que he sentido que no estaban en absoluto interesados en todo lo que yo podía ofrecerles y que su filosofía de trabajo está muy alejada de los conceptos japoneses que me hubiera gustado encontrar. Por lo tanto en esos casos en los que sientes que estás infravalorado y que no te ayudan a seguir creciendo como músico es mejor cuanto antes finalizar la relación.
En el caso de Mesa Boogie la relación es bastante fría ya que a pesar de utilizar su equipo continuamente en vídeos demostrativos y difundirlos lo más posible, no muestra ningún tipo de feedback ni de interés por mi trabajo. No por ello he pensado en algún momento en dejar la marca, ya que desde el principio fue así y su base está en USA, por lo que hasta cierto punto se puede llegar a entender –aunque no guste- la distancia o frialdad en la relación si su dpto. de artistas comparan mis actuaciones anuales con las de sus artistas americanos.
D’addario funciona mucho mejor y están mucho más abiertos al contacto, al diálogo y a la actitud proactiva y activa. Es cierto que también se muestran distantes, pero al menos tengo el placer de contar con el contacto directo, humano y real de Mayte Leturiaga (Directora de Nueva Letusa y Mike Smale (Export Sales Specialist).
G Lab es una marca con la que vendrán novedades pronto y con la que tengo una estrecha relación, ya que después de un tiempo he tenido contacto directo y personal con su director Jakub Jakubowski, con el que ha surgido una estupenda energía profesional y personal.
RightOn Straps son tremendamente cercanos y es un lujazo contar con su apoyo y excepcional trato: con ellos sí que siento realmente que existe un trato excelente.
Mas66/Aliaga Luthier me ha preparado unas pastillas que me parecen impresionantes y que han sido un total acierto desde el primer intento, además de dar un trato humano muy bueno y saber muy bien cómo hacer su trabajo.
Qué decir de Crazyboxpedals… hay una relación de amistad que ha surgido del trabajo y conecto muy bien a muchos niveles con su CEO, Gaby López… es tan friki como yo… o más!!! Hay varias novedades a punto de salir que estamos deseando compartir para que comprobéis el nivelazo que hay en España en construcción de pedales.
Spectraflex a pesar de estar ubicada en Florida y de tener un concepto americano de endorsement, sí que muestra a través de su director Dave Russell, una muy buena comunicación y un trato realmente bueno: muy contento de pertenecer a la familia Spectraflex, sin duda.
KTS Musical Products me parece una gran desconocida en España pero con una calidad realmente alta. La relación con su presidente Hiroshi Masuda es muy buena y he tenido la suerte de conversar con él personalmente en Los Ángeles en mi visita al NAMM. Desde el primer momento ha mostrado una comunicación muy buena y un apoyo total a mi trabajo, facilitando además mi relación con otras firmas japonesas, y esto no es tema fácil…
Estas marcas poseen diferente envergadura pero demuestran en mayor o menor medida sus ganas de apoyar al músico profesional teniendo en cuenta sus necesidades y circunstancias.
8. Recientemente has asistido al NAMM en Estados Unidos. ¿Nos podrías contar cómo es la experiencia de una feria de estas características?
La visita al NAMM ha sido todo un acontecimiento porque me he dado cuenta aunque ya lo supiera de antes, que el referente de producto y relaciones profesionales se encuentra allí, ya que puedes cruzarte con numerosos artistas consagrados y con muchísimos profesiones de muy alto nivel que se muestran muy abiertos a dialogar contigo y a comentar cualquier detalle sobre su producto.
Lo que más me llamó la atención fue la amabilidad y la apertura de todo el mundo allí, incluso fuera de la feria. Un ambiente relajado, agradable y comunicativo en todos los casos: desde la gente que iba andando por la calle ajena a la propia feria hasta cualquier profesional. Lógicamente rancios hay en todos los sitios pero sí que los compañeros que estuvimos allí comentamos que nos encantó el buen carácter de con quien nos encontramos.
9. En tu página web se puede ver el equipo con el que cuentas, ¿cuál es tu guitarra favorita y cuál es la mejor que ha caído en tus manos?
Yo no hablaría de guitarra favorita porque cada una me ofrece un sonido y un tacto diferente por lo toco de modo diferente con cada una de ellas y cada una aporta algo que las demás no pueden darme.
Con mi Ibanez Musician grabé las guitarras solistas del disco y siempre será especial por eso, por su mástil, por su comodidad, y por su gran sonido. Mi Strato es una delicia y siempre es un placer tocarla. La Les Paul Supreme es un caballo de batalla con un sonido espectacular y la Yamaha SG basta con que diga que ha sido la elegida para ser la guitarra con la que he hecho todas las actuaciones de mi disco que, por ejemplo, con la Strato no podría…
(Puedes ver el equipo de Abel Franco AQUÍ)
10. ¿Qué planes de futuro y proyectos tienes a corto, medio y largo plazo?
Tengo en mente volver a preparar directos para el disco ya que estoy convencido de que no ha dado de sí en directo lo que podría haberlo hecho.
Es muy complicado en este país, donde se quieren estribillo rápidos y “diversión” presentar proyectos instrumentales que deben saborearse escuchando y prestando atención, y no siempre con un cubata en la mano gritando con el compañero de al lado.
Llevar músicos a sueldo es insostenible y contar con músicos que apoyan por el proyecto con las condiciones antes comentadas tiene un final muy cercano ya que este estilo no puedo presumir de llenar repetidamente las salas con los mismos visitantes cada mes o cada quince días. Además las agencias no se interesan por este estilo y las salas sólo quieren saber “cuánta gente vas a llevar”. Aunque les pongas un tenderete de morcillas caducadas, si se llena “gustas”.
Llevo tiempo dando vueltas el volver a profundizar en el estudio ya que después del embarazo y nacimiento de mi hija los ritmos ha sido difícil, pero ahora ya siento que puedo volver a empezar a dedicar más tiempo.
Hay dos proyectos muy ilusionantes: uno de ellos tiene que ver con Japón pero que aún es pronto para desvelar y el otro es que empiezo a sentir que se acerca el momento de trabajar en un nuevo disco. Paralelamente hay varios proyectos con diferentes marcas en diferentes niveles, así como con alguna banda de versiones con buenos compañeros y alguna formación en dúo, con las que espero que este año sea bastante bueno en términos de actuaciones.
Si quieres saber más de abel franco visita:
- Web personal y profesional: www.abelfranco.com
- Canales de Youtube: Back to Basics y Abel Franco
- Y si lo que quieres es mejorar como guitarrista y tener el lujo de dar clase con él, contacta con él, ya que ofrece tanto clases particulares, a distancia y online.